Twitter cambió la cobertura periodística tradicional de las catástrofes naturales como ocurre en este momento con el terremoto en Haití. Antes, la información, en este tipo de tragedias, demoraba horas o días en llegar al público. Ahora son minutos o segundos gracias a Twitter. En las últimas horas circuló una avalancha de información sobre la tragedia de Haití en Twitter. Incluso, al punto de advertir de numerosas fotos falsas y un sinfín de rumores no confirmados hasta el momento. Pero una vez más el microblogging colaboró en la difusión de información mucho antes que las páginas informativas.
Twitter cambió la cobertura periodística tradicional de las catástrofes naturales como ocurre en este momento con el terremoto en Haití. Antes, la información, en este tipo de tragedias, demoraba horas o días en llegar al público. Ahora son minutos o segundos gracias a Twitter. En las últimas horas circuló una avalancha de información sobre la tragedia de Haití en Twitter. Incluso, al punto de advertir de numerosas fotos falsas y un sinfín de rumores no confirmados hasta el momento. Pero una vez más el microblogging colaboró en la difusión de información mucho antes que las páginas informativas.
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